Inigual.
25 de mayo de 2015
Lagrimas lisas sobre fondo azul.
20 de mayo de 2015
Tú, mi preposición favorita.
8 de mayo de 2015
As de corazones.
Sacar la baraja polvorienta del cajón y elegir una. Cualquiera. Y jugárselo todo a esa carta. Todo a una sola carta.
Y esa carta eres tú. Tú y tú grandisimo corazón. Cuando me pierdo en los hoyuelos que te salen en la barbilla si te haces el ofendido y me picas. Y tienes esa puta manía de ser mi trébol de cuatro hojas. Eres tan duro como los diamantes, y aun que te rayen e intenten romperte en mil tú aguantas, por que eres una fortaleza. Mi fortaleza. Atraviesas mi alma y me dueles más que mil espadas. Solo tú sabes curar mis heridas mejor que una copa de alcohol. Mirarte y sentir que no cambiaría ni un milímetro de tu piel y de tu ser ni por todo el oro del mundo. Y golpeas. Golpeas duro como un basto y me destrozas y me desmontas. Me vuelvo un puzzle de mil piezas a la que le falta una. Y esa pieza eres tú.
3 de mayo de 2015
Home sweet home.
Sintecho de emociones pide limosnas de adrenalina en forma de sexo descontrolado y sin medidas.
Abraza su agujero negro, que se traga cada atisbo de sentimientos que, por culpa del aire, roza su piel.
Lee poesias de amor pero su cabeza no admite que eso pueda ser algo más que simple ficción.
Era una sirena que no ansiaba el mar. Solo le gustaba soñar despierta que bebía día y noche de la sal de sus labios.
Solo trazaba en el lienzo de su mente las caracolas que dibujaban sus lunares.
Autómata con vida propia.
Esquema imperfecto de persona.